lunes, 9 de junio de 2014

El abrazo

Ese abrazo fue expresión de amor enfurruñado, de odio y cariño, de te he echado de menos, siento que no me quieres, te quiero pero no lo veo, te quiero pero me dañas, tengo miedo a perderte, estoy perdida y te estás perdiendo, eres mi cachito y me produces pesadillas, soy tu cachito pero no te siento cerca, me siento abandonada, siento culpa, no he sabido cuidarte.

Ese abrazo tapaba y expresaba. Eran brazos que abrazan un cuerpo tenso, indeciso, una mente inmadura y perdida, sedienta de cariño; era cuerpo abrazado por otro cuerpo sufriente y pequeño, endurecido, maduro pero frágil.

Ese abrazo fue el inicio de un reencuentro, de una nueva andadura, el diseño de un porvenir que parirá lo no dicho, que expresará, que colocará las piezas descolocadas, que irá sembrando confianza y cosechará más amor, más paz.

El abrazo... porque el cuerpo apenas esboza lo que el corazón coraza no es todavía capaz de expresar.

El abrazo, el esbozo de un nuevo inicio.

No hay comentarios:

Publicar un comentario