miércoles, 2 de abril de 2014

Abril

Recuerdo abril en Granada. Salíamos de la adolescencia, en plena juventud y sueños estábamos. Recuerdo la casa de Federico García Lorca en Fuentevaqueros. Recuerdo abril, aquella primavera, las flores y el jazmín oloroso, el árbol del amor en la Alhambra. Tibio abril, primavera de ilusiones. Recuerdo el perfume de Abril, que me encantaba. Ese corazón inquieto, siempre anhelante y soñador. Guardé cada pétalo, cada papel, la esencia de aquel abril, que varios años después viene a mí de nuevo en abril. 
Abril y sentir.
Abril y abrir. Abre la ventana, que entre el aire como un remolino, que se lleve la bruma, el polvo y la duda.
Abril para morir. Y revivir.

No hay comentarios:

Publicar un comentario